martes, 15 de marzo de 2011
Ramón Lobo en #congresodigital en Huesca
lunes, 14 de marzo de 2011
Lejos, pero no tanto: las revueltas árabes en Retiro
domingo, 13 de marzo de 2011
¿Qué es Google?
Hace unos días me preguntaron qué era Google. Y la verdad, no estaba muy segura de entender siquiera qué significan esas 6 letras a las que ya estoy tan acostumbrada que no podría vivir sin ellas. Así que me di cuenta de que yo todavía soy de la era pregoogle, y lo descubrí.
Google es una tarde entera en la biblioteca pública buscando el mapa menos desfasado para que el trabajo de Geografía se ajustara, más o menos, a la realidad. Aunque esa desactualización te diera ciertas alegrías momentáneas, como cuando leías en una Enciclopedia de Fútbol que lo más reciente que hizo el Zaragoza fue ganar la Recopa del 95, cuando ya andabas sufriendo porque bajábamos a segunda. Es seleccionar enciclopedias en las estanterías de Naturaleza, Literatura o Arte dependiendo de la asignatura. Son muchas horas copiando lo más interesantes de los artículos -el copy/paste no lo inventó Google-; eligiendo las fotos adecuadas aunque sin poder elegir ni grandes ni medianas ni pequeñas, sino las que había y fotocopiándolas en la sala de reprografía, a cinco pesetas la unidad en blanco y negro y diez en color.
Es preguntarle una duda a tu padre y enterarte, años después, que se pasó parte de la noche preguntando a sus amigos para que la respuesta estuviera en tu almohada por la mañana. Los padres nunca defraudan a sus hijos. Y también es aprender a buscar en la Larousse que decora todas las casas, con sus tomos de actualizaciones incluidos. Es conocer los restaurantes por haber pasado por la puerta y preguntarte cómo sería la comida de allí. Y atreverte a entrar porque recuerdas que en el ascensor alguien habló de ese sitio.
Google es memoria, pero una que se está desvaneciendo por falta de uso. O que, simplemente, está mutando. El día que la pierda del todo la googlearé, seguro que la encuentro.
viernes, 11 de marzo de 2011
Y esto es todo, amigos
Huesca sigue tan pausada como siempre, pero se ha vuelto a convertir en geek, gurú y 2.0.
Después de 10 eventos entre mesas redondas, conferencias y tertulias, trato de hacer un balance positivo porque hoy ha salido el sol, estoy rodeada de amigos, somos los nuevos periodistas y lo estamos pasando bien.
Pero, y aquí viene el pero, me quedo con casi la misma sensación de la que salí de Burgos. (sin alcohol). Los congresos sirven para hacer contactos, pensar un poquito -poquito- en lo que se supone que viene o que traeremos, pero que nos vendrá queramos o no, nosotros decididiremos en qué puesto nos quedamos. Poco más.
Muchos soportes y muchos adjetivos que adornan estos días a la palabra PERIODISMO (así, con mayúsculas), pero que solo es dar vueltas y vueltas a unos términos abstractos y ajenos a lo que desde siempre es y será el periodismo: buscar, preguntar, cuestionar, filosofar, criticar, sentir, vivir, ayudar y poner todo eso en un papel, en una tableta o en las nubes, si lo logramos inventar. Que todo llegará.
Todos parecemos mejores periodistas después de tantas ideas y tantas buenas voluntades. Pero creo que eso solo se puede conseguir con un boli en la mano o con un ordenador bajo los dedos. Es decir, utilizar los cinco, seis o diez sentidos para captar el mundo desde nuestro punto de vista -que siempre será único y nuestro valor añadido- y mostrarlo de forma emocionante, atractiva y que haga pensar y/o entretener a quien quiera leerlo.
Por más vueltas que demos... esto es todo, amigos.
jueves, 10 de marzo de 2011
Huesca 2
Una primera y buena diferencia: el iPad no sirve para matar moscas con tanta eficacia como lo hace el periódico en papel.
Pero ¿qué ponemos en iPad? La tableta solo es una herramienta, ¿de qué se nutre?
Como decían ayer, hay que informar, pero también es importante entretener. De las 10.000 millones de descargas que ha alcanzado Apple, las aplicaciones mayoritarias son de juegos, nada sobre medios de comunicación.
¿Qué tendrán ellos para informarse en 20 años?
No lo sé, pero nosotros ya tenemos mucho y lo utilizamos así:
- Una serpiente muere de una intoxicación por silicona tras morder el pecho de una modelo.
- Un mapache le muerde el pene a un hombre que intentaba violarlo.
- Una estudiante permite que la penetren con un consolador delante de sus compañeros.
Las tres noticias más leídas de una página de un medio de comunicación.
¿Seguro que el iPad salvará los medios de comunicación? Sigo pensando que nos estamos quedando en lo superfluo y que estamos olvidando lo realmente importante. Que cada uno crea qué es lo importante.
Miguel Jiménez: “No sabemos si hemos entendido bien la crisis”
En ese sentido, Jiménez comentó que “se ha tratado de explicar lo mejor que se ha podido, pero no sabemos si la hemos entendido. Pero creo que, sobre todo, hemos sido honestos”. Apuntó Pérez que quizá la prensa llegó tarde y que la la línea que se siguió fue la de explicar de una forma histérica: La velocidad de los mercados fue un gran aliado para que los medios expusieran datos y conceptos rápidamente, sin tiempo de reflexión y quizá “faltó un componente didáctico que evitó que llegara de forma clara a los lectores”, admitió Jiménez.
En cualquier caso, ninguno de los dos cree que la rapidez de internet sea incompatible con el análisis, especialmente, en el ámbito económico. “La rapidez no está reñida con la calidad”, comentó Pérez. “Quizá de lo que adolece es de ofrecer una información completa, pero no es menos precisa que la elaborada con posterioridad”, apuntilló Jiménez.
Solo en un asunto las opiniones de los dos ponentes fueron casi opuestas. Con respecto a la convergencia entre papel y red. La Vanguardia aboga todavía por cuidar el material físico y cuida tanto el diseño como la calidad y el formato. "Sigue habiendo un cuidado exquisito por el papel porque sigue siendo la base de los negocios", aseguró Pérez. Además, la redacción de internet es prácticamente independiente de la redacción papel. En contraposición a El País, que tiene una redacción mucho más integrada, "en internet los temas se expanden como la pólvora y da unas potencialidades que el papel no ofrece", confirmó Jiménez.
Poco más se dijo acerca de si “estamos explicando la crisis hasta que llegaron las preguntas del público, que siempre suelen ser más ácidas e incómodas. Un joven echó en falta las historias humanas que siempre son las caras más afectadas por los problemas económicos. Ninguno de los dos ponentes tuvo argumentos para rebatir. Era tiempo para hacer la digestión.
Mesa redonda: "El papel de las redes sociales en la cobertura periodística"
¿Revolución en las redes sociales?
Guillermo Culell (Grupo El Mercurio, Chile): El periodismo tiene que darle una forma coherente al contenido de las redes sociales.
En el caso de Egipto se corta Twitter, es Google quien ayuda a que continúen los mensajes. El precabreo es importante.
Jean-François Fogel (periodista y consultor de medios digitales): es un buen momento para tomar nota de lo que está pasando. Debemos usar esto para potenciar el ejercicio de nuestra profesión. Independientemente de que la revolución sea en Twitter o en la calle, lo importante es que se haga.
¿Es para conocer al otro o es una pared?
Francisco Sierra (Antena 3): Lo que te permite es la interectividad total, pero el problema es que no se escuchen los unos a los otros.
¿Estamos preparados los profesionales etar en contacto directo con el receptor?
Rosalía Lloret (Unidad Editorial): esto ya lo hacíamos, las capacidades de antes eran más limitadas, pero ahora puedes acceder a mucha gente más. Por supuesto que hay que escuchar.
Pueden saber más que tú y sus aportaciones pueden ser muy interesantes.
Culell: Twitter es la medición del rating en tiempo real.
Fogel: No hemos demostrado siquiera los primeros síntomas de la respuesta en tiempo real. Todavía nos faltan las herramientas para hacerlo, sí tenemos la búsqueda y es donde podemos demostrar un gran talento o fracasar.
¿Está la inmediatez reñida con la profundidad?
Rosalía: hay formas de periodismo complementario: no todo es la última hora. El periodismo detallado es tan importante como la inmediatez.
Culell: Por qué tenemos que priorizar la profundidad? Yo la valoro, pero no como la única opción del periodismo.
Sierra: Twitter sirve para diferentes usos, te puedes informar, pero también te puedes entretener. No todo el mundo te va a pedir los mismos niveles de profundidad ni en los mismos soportes.
Como casi siempre, lo mejor, las preguntas del público. Se le ha dado voz, pero poco. El tiempo siempre en contra de las buenas historias.
Huesca 10am
Introducción institucional con entrega de premios incluida, con los siguientes galardonados:
Premio José Manuel Porquet para Mónica G. Prieto: "Los lectores quieren leer, tenemos que volver al modelo de éxito: buscar historias y no quedarnos en lo superficial buscando nuevos formatos".
Premio honorífico para Antonio Angulo, hoy primer día de exdirector de Alto Aragón, se jubila: "Yo no cambié nunca el concepto primero de hacer Periodismo. La palabra digital puede ser engañosa y nos puede encerrarnos en nuevas palabras vacías. El soporte tiene poco valor, hay que adaptarse, pero debe caracterirzarnos el periodismo. Cada vez hay más obstáculos para conseguir la verdad: rigor, veracidad, trabajo, deontología cada vez más arrinconada. Insisto que no hay que perder de vista las cualidades humanas y principios fundamentales. Lo más grande en la vida y en todo es la verdad"
Charla inaugural de Javier Moreno, director de El Pais: "A medio plazo sobrevivirán los mejores periódicos, pero el futuro de todos ellos es la red. Seguirá habiendo demanda durante un tiempo, pero no será rentable para cubrir los costes. Se acabará como consumo masivo.
Los blogs a veces hacen mejor las cosas que los periodistas y tomar la delantera, eso es preocupante. Los periodistas están entre el desdén y la irritación ante la llegada de internet". Cita a Pulitzer para decir que "un periódico puede enviar la misma idea a miles de personas", pero internet puede hacerlo a millones en el mismo momento.
"Cualquier adjetivo al sustantivo periodismo es rebajar la calidad".
"No hay democracia sin prensa libre. La misión del Periodismo es controlar el poder en nombre de los ciudadanos".
Da comienzo el XII Congreso de Periodismo Digital.
Crónica de la primera mesa redonda: próximo post.
miércoles, 9 de marzo de 2011
Inocencio Arias en el Máster

jueves, 3 de marzo de 2011
Lo hecho, hecho está
El 23-F vuelve, como cada año, a mostrarnos lo que pudimos ser y no somos. 30 años del mismo discurso, de las mismas preguntas, de los mismos personajes, de los mismos disparos. Tres décadas del “se sienten, coño” que parece que no han sido suficientes si nos atenemos a la cobertura periodística con la que nos levantamos el domingo.
Lo mejor es cuando se pregunta por qué estaba haciendo usted en ese momento. Todo el mundo recuerda, perfectamente, ver a Tejero empuñar su arma y soltar su frase; todo el mundo, hasta que le recuerdas que no hubo imágenes del interior del hemiciclo hasta el día siguiente en el que España respiró tranquila. O eso dicen y nos llevan repitiendo treinta años.
No podemos estancarnos en el pasado, que así no se avanza, dijeron aquellos que condenaron a Garzón por “remover tumbas y abrir viejas heridas”. Nunca se encontraron las armas de destrucción masiva en Irak, “pero podían haber existido”, aseguran otros.
Si de verdad hay que avanzar y dejar todo eso atrás, qué mejor día que el miércoles. Recordar un día en el que todo pudo pasar, pero nada pasó, es como recordar que hoy podía haber ido al cine, y no fui. Los futuribles solo nos alejan de la realidad y nos enfrentan a los mismos fantasmas que nos llevan persiguiendo demasiado tiempo.
Y ahora, para colmo, la película. Parece que se nos han agotado las ideas para guionizar la guerra civil y la posguerra –que ya era hora- y nos pasamos ahora a los 80. Lástima que todavía no haya pasado el tiempo suficiente para ver ese periodo con la distancia suficiente. Lástima que todavía este suceso tenga treinta años y no haya pasado ya, definitivamente, a una línea en el libro de historia de los nuevos estudiantes.